Wobenzym y Wobemugos para el tratamiento de Enfermedad de Crohn.

La enfermedad de Crohn es una enfermedad crónica autoinmune. La Colitis Ulcerosa y la Enfermedad de Crohn son patologías intestinales inflamatorias crónicas. El tratamiento con enzimas proteolíticas como Wobenzym y Wobemugos en los pacientes con estas patologías es muy importante y ha probado ser eficaz. Las enzimas de estos compuestos evitan que el sistema inmunitario del individuo ataque su propio intestino produciendo inflamación Promueven la desinflamación, aceleran la cicatrización y evitan la degeneración del tejido. En la Enfermedad de Crohn frecuentemente la parte afectada es el íleon o tramo final del intestino delgado, aunque la enfermedad puede aparecer en cualquier lugar del tracto digestivo.
La presencia de granulomas múltiples localizados en los segmentos intestinales afectados es una de las características típicas de la enfermedad de Crohn. La fibrosis afecta todo el espesor de la pared intestinal, se forman fistulas y abscesos.
Los conocimientos modernos en inmunología ayudan al estudio de del desarrollo de la Enfermedad de Crohn y otras enfermedades autoinmunes. Estas enfermedades cursan con inflamación en tejido conectivo (colagenosis). Según estudios, todos los cuadros clínicos de destrucción de los tejidos, de etiología autoinmune, en los que participan auto anticuerpos (AAC), inmunocomplejos (IC) y linfocitos T, se desarrollan bajo un esquema similar. A si pues, el tratamiento con enzimas proteolíticas es eficaz en patologías autoinmunes tan distintas como Esclerosis Múltiple, Hepatitis Crónica Activa, Tiroiditis de Hashimoto, Esclerosis Lateral Amniotrófica, Síndrome de Guillain Barre, Miastenia Gravis, Polimiosistis, Enfermedad de Crohn, Artritis Reumatoide, Arterioesclerosis, Enfermedad de Basedow, Dermatomiositis y Lupus Eritematoso Sistémico.
En la Enfermedad de Crohn las enzimas tienen un efecto fibrinolítico que evita la fibrosis que se forma en la pared intestinal. Las enzimas de papaína de WOBENZYM y WOBEMUGOS son las encargadas de recortar los inmunocomplejos patógenos que se forman en las paredes del tracto digestivo, evitando la reacción inmunológica de cascada que destruye este tejido. Las enzimas actúan como un desinflamatorio potente y estimula la cicatrización y regeneración del tejido.