Se lo conoce también con el nombre de colitis mucosa, neurosis intestinal o colitis espástica.
El síndrome de intestino irritable es una alteración crónica del funcionamiento del colon, sin que existan lesiones orgánicas. Uno de cada 5 personas adultas presenta síntomas, pero pocos buscan ayuda profesional. Tiene mayor incidencia en las mujeres entre 20 a 40 años.
Debido a estímulos nerviosos no adecuados y a dietas con alto consumo de alimentos refinados, los pacientes con SII presentan contracciones musculares del tracto digestivo que carecen de coordinación y regularidad. Esto afecta a la correcta movilización de los alimentos y del material de desecho, lo que da lugar a la acumulación de toxinas y mucosidades, que pueden incluso obstruir el intestino. Puede afectar a todo el tracto digestivo, desde la boca hasta el ano.
Esta enfermedad llega a ser dolorosa pero no grave. Se puede aliviar y mejorar sus síntomas, corrigiendo la dieta, practicando ejercicio con regularidad, y si es necesario complementando con algún suplemento nutricional en caso de existir carencia de alguno.
Causas
Sus causas se desconocen, pero algunos científicos asocian esta enfermedad a algún virus o bacteria. Aunque también es probable que este síndrome se encuentre muy relacionado con la dieta (alto consumo de alimentos refinados) el estilo de vida, es decir el estrés, trastornos emocionales y/o nerviosos. También puede estar relacionado con el uso excesivo de laxantes, antibióticos y antiácidos, ya que todos alteran la microflora bacteriana.
Es frecuente en personas que
Cometen errores alimentarios graves,
Consumen café en exceso,
Consumen comidas rápidas y cometen excesiva ingesta de hidratos de carbono complejos (pizza, tacos, empanadas, emparedados, etc.),
Que ingieren en forma muy apresurada (comer rápido),
Que hacen una única comida diaria y excesiva y donde no se respeta el orden de las comidas,
Consumen picantes o frituras en forma exagerada.
Síntomas
Estreñimiento y diarreas de forma alternada
Dolor abdominal (después de comer)
Defecación con mucosidad
Náuseas y vómitos
Flatulencias y distensión abdominal
Sensación de saciedad
Anorexia (malnutrición por no absorber los nutrientes)
Intolerancia a algunos alimentos
Dolor de cabeza
Presentan síntomas similares las siguientes enfermedades:
Enfermedad de Crohn
Diverticulitis
Intolerancia a la lactosa
Colitis ulcerosa
Enfermedades relacionadas
Entre las dolencias relacionadas con el síndrome de intestino irritable se encuentran:
Cáncer de colon
Trastornos vesiculares
Mal absorción de nutrientes
Alergias alimentarias
Diabetes
Insuficiencia pancreática
Úlceras e infecciones parasitarias.
Artritis
Diagnóstico y tratamiento
El correcto diagnóstico exige descartar aquellos trastornos con síntomas similares, por lo tanto se deben realizar varias pruebas diagnósticas como la colonoscopia, biopsia rectal, examen de sangre y de materia fecal, palpación abdominal, tacto rectal, etc.
Su tratamiento principal es con PSYLLIUM PLANTAGO, y se deben corregir los hábitos inadecuados adquiridos (comer muy rápido, beber gaseosas, fumar, etc.), adecuar la alimentación según se esté padeciendo diarrea o estreñimiento y tratar algún trastorno nervioso o emocional existente con psicoterapia.
Recomendaciones higiénico- dietéticas a seguir:
Realizar una dieta baja en grasas, y alta en proteínas: se necesita un 30% más de proteínas y también un mayor aporte de minerales y micronutrientes, que se pierden por causa de los episodios de diarrea.
Respetar los horarios de las comidas, no saltarlas y comer despacio.
No abusar de los picantes y de las comidas muy condimentadas
No tomar bebidas alcohólicas
No beber demasiado café
Evitar el tabaco
No ingerir comidas, bebidas y alimentos que generan o contienen gases
Reducir en la medida de lo posible el estrés, teniendo una actitud mental positiva
Es conveniente reposar después de comer y no consumir alimentos después de cenar
No comer en exceso. Consumir pequeños volúmenes de comida
Acostarse dos y tres horas después de haber comido o cenado
Aspectos a tener en cuenta para aliviar y mejorar el síndrome de intestino irritable:
La alimentación debe consistir en realizar un régimen adecuado intestinal, con moderación de estímulos intestinales cuando no se padece ni diarrea ni estreñimiento. Pero debe adaptarse siempre al momento según exista alguno de los proceso digestivos antes mencionados.
La fibra de la dieta debe ser soluble PSYLLIUM PLANTAGO o avena , puesto que regulan el transito intestinal, sin irritar (no tomar salvado de trigo)
Beber abundante agua, para así complementar y potenciar la acción de la fibra, como para también reponer la deshidratación ocasionada si existe un período de diarrea.
Evitar las grasas animales, los fritos, los chocolates, alimentos procesados.
Evitar irritantes de la pared intestinal como la lactosa y todos los productos lácteos.
El alcohol, el café y el tabaco también son irritantes que deben evitarse.
Realizar ejercicio físico con regularidad,ya que relaja y ayuda a aliviar los síntomas.
Siempre debe acudir a su médico para realizar revisiones periódicas ya que el colon irritable está íntimamente relacionado a padecer cáncer de colon.Para prevenirlo es necesario tomar regularmente PSYLLIUM PLANTAGO LA BONNE VIE
LA BONNE VIE contiene CASCARA DE SEMILLA PSYLLIUM PLANTAGO 100% Natural. No contiene excipientes, azucares, colorantes ni saborizantes porque agravan el problema del paciente con SII.
Debido a sus propiedades emolientes, al aumentar el volumen de las heces y disminuyendo su consistencia, La Bonne Vie protege la pared intestinal, de esta forma previene y trata eficazmente el Colon Irritable. La Bonne Vie ha demostrado su efecto en el tratamiento del síndrome del intestino irritable, con una normalización del tránsito intestinal y una significativa reducción del consumo de espasmolíticos.
Por su facultad de hincharse en el agua, la cáscara de semilla de Psyllium actúa como laxante, sin producir urgencias. Es también emoliente y desinflamatoria.
Se usa contra el estreñimiento pertinaz, síndrome de colon irritable, colitis ulcerosa, diverticulitis, hipercolesterolemia y hemorroides. Coadyuvante para reducir los niveles de glucosa en pacientes con diabetes tipo 2. Previene cáncer, enfermedades cardiovasculares y diabetes.
La fibra insoluble de La Bonne Vie (15%) ayuda a proteger al organismo contra el cáncer de colon porque acelera la salida de heces fecales.
La fibra soluble de Psyllium en agua (85%) es degradada por bacterias a nivel del colon, formando un gel emoliente y desintoxicante usado en programas de limpieza.
La Bonne Vie ayuda a la desintoxicación ya que actúa como una escoba intestinal, barriendo las toxinas a través del tubo digestivo. En el tratamiento de constipación alivia la hinchazón, fatiga, dolor y letargo mental,
La Bonne Vie reduce el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular, hemorroides, cáncer y diabetes.
La Bonne Vie mejora el control glucémico y previene complicaciones cardiovasculares en pacientes diabéticos.
Se ha comprobado una mayor prevalencia de divertículos cuando una persona tiene una dieta con alto consumo de alimentos refinados. El consumo de La Bonne Vie ha logrado prevenir también esta patología. Las alteraciones colónicas de la diverticulosis son potencialmente reversibles si los pacientes siguen una dieta con un elevado contenido en fibra, puesto que el grosor de la pared del colon es inversamente proporcional a la fuerza de distensión intracolónica.
Además La Bonne Vie previene las alteraciones motoras que favorecen un aumento de la presión intraluminal, protegiendo al colon del desarrollo de divertículos al aumentar la masa fecal, lo cual, a su vez, incrementa su diámetro.